Fueron miles las personas que desfilaron por la Plaza “Hipólito Yrigoyen” durante el fin de semana para disfrutar de los juegos, probar alguna delicia o escuchar a su artista favorito. Todas ellas coincidieron en la buena organización y en las ganas de que esta celebración no sea la última.
Fueron tres los días en los que las vecinas y los vecinos de Quequén, y también de otros puntos del distrito, pudieron disfrutar de todas las actividades preparadas por la Delegación y distintas áreas del municipio para celebrar los primeros 169 años de vida de la ciudad del faro.
A medida que avanzaba la tarde del domingo, la última de festejos, la gente se iba acercando en masa hasta la Plaza “Hipólito Hirigoyen”. Algunos eligieron el césped para disfrutar del sol, otros se llevaron su manta o reposera. Lo que nunca faltó fue el mate y la charla, mientras transcurría sobre el escenario el paso de toda la grilla de artistas locales e invitados.
En el sector de los talleres de Cultura y las estaciones recreativas de Deportes se agrupaban los más pequeños, mientras los más grandes de la familia elegían visitar la feria de emprendedores o degustar alguna delicia en el corredor gastronómico.
Entre los chicos, los más atrevidos se animaban al Samba o a los saltarines, pero también estaban repletos de niños los tradicionales juegos del céntrico espacio público que la gestión del intendente Arturo Rojas pudo reivindicar como punto de encuentro de toda la comunidad.
“La verdad que está todo muy lindo y muy bien organizado”, aseguró María, ubicada con su sillita y junto a su compañero en la esquina frente a la Delegación, en primera fila, disfrutando de la performance en vivo del “Grupo Añoranzas”. “Estuvimos almorzando acá y la verdad que lo felicito a Arturo, me parece muy bien porque con esto nos entretenemos, ojalá se haga siempre”, señaló.
Un poco más atrás, Micaela y Graciela coincidieron con lo atractivo del festejo. “Vinimos ayer, nos quedamos hasta el cierre y estuvo re lindo”, señalaron sobre la jornada que terminó con la presentación de “La Nueva Luna” el sábado, convencidas de quedarse hasta el final del domingo para disfrutar junto a la presencia estelar Nicolás Mattioli, que cerró las actividades a pura cumbia santafesina.
Haciendo una ronda entre ellas y esperando por el turno para llevar a sus niñas a los juegos, Micaela, Carla, Wendy y Lorena también hablaron de lo grato que fue el evento para los quequenenses. “Súper lindo, la verdad que está hermoso”, dijo una; “aparte, acompaña el día también”, colaboró la otra; mientras que la última de las amigas que se animó a hablar indicó que “estaría buenísimo que se haga algo así todos los fines de semana o domingo por medio”.
Promediando la tarde y cuando ya pisaban las tablas Fito Pinzone con la agrupación “Unidos por la Danza”, Sol y Gustavo recién estaban llegado con su pequeña a la plaza y ya estaban asombrados por la cantidad de cosas que les ofrecía el aniversario. “Está re lindo, nada que ver con otras veces. Hay para comer, para tomar y una banda de gente. Hay de todo y también precios accesibles, así que está genial”, resumieron.
Más cerquita del escenario principal y de las delicias que vendían los emprendedores, Cristina y Graciela compartían un mate mientras escuchaban a las agrupaciones musicales. “Llegamos justo para el corte de la torta que estaba riquísima y ahora mirando un poquito de folclore”, explicaron, e hicieron un rápido balance del evento: “Me parece perfecto que tengamos algo como esto en Quequén. Recién compramos pastelitos, que estaban muy ricos”, dijeron entre risas, y terminaron: “Todo muy lindo, la verdad que completito”.
Como estos, miles de testimonios se fueron cruzando desde el viernes y hasta que la noche del domingo despidió al nuevo festejo de la ciudad de Quequén, todos con la expectativa de que la plaza se convierta de nuevo en un lugar de encuentro en el que la familia pueda disfrutar y deseando, por supuesto, que su querida ciudad avance hacia un futuro cada vez mejor.