En estas elecciones, varias comunas tuvieron un porcentaje de sobres sin boleta de ningún partido político adentro extremadamente alto.

Si bien en las elecciones generales del pasado domingo el voto en blanco disminuyó a nivel nacional en relación a las votaciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), ya que pasó del 4,78% al 1,95%, varios municipios bonaerenses tuvieron niveles históricos de sobres sin la boleta de ningún partido político dentro de ella.

Mayoritariamente impulsado por la falta de opciones a la hora de elegir, o simplemente desencantados por el panorama político actual, una gran porción de distritos de todas las secciones electorales sufrieron un porcentaje de voto en blanco extremadamente alto, e incluso en algunos casos hasta llegó a superar a diversos candidatos a intendente.

En Monte Hermoso, el mano a mano entre Unión por la Patria y Juntos por el Cambio impactó seriamente en el electorado, debido a que un 22,60% de la población decidió votar en blanco. Es decir, que de 6732 votos válidos, 1529 no tuvieron ninguna boleta, ni del peronismo ni del macrismo. Hernán Arranz (UxP) quedó con 65,73%, mientras que el candidato de JxC, Ariel Muzi, logró el 34,26%.

En Ayacucho, la «grieta» elevó el voto en blanco al 21,18%. En otras palabras, de 10.941 sufragios afirmativos, 2.972 no tenían papeleta. En definitiva, Emilio Cordonnier, de Juntos por el Cambio, se quedó con el municipio de la Quinta sección electoral con el 67,52% (fue el intendente más votado de toda la provincia de Buenos Aires), seguido de Juan Pedro Erreguena de Unión por la Patria, con un 32,47%.

Lobería también se sumó a estos casos atípicos. Al igual que los dos anteriores, la poca oferta de candidatos impactó en la decisión de la población, ya que un 20,78% se decidió por ningún postulante: de 11.304, 2373 votos fueron en blanco, imponiéndose el candidato cambiemita Pablo Barrena con el 59,62%, por sobre Juan Pablo Cappelli (UxP), que obtuvo el 40,37%.

En General Madariaga, el voto en blanco llegó incluso a superar a un candidato a intendente. En efecto, con un 18,01% (2.614), el sobre vacío fue más elegido que el representante del Frente de Izquierda, que obtuvo un 5,04%. El resto de los 14.459 votos totales decidieron que el actual intendente Carlos Santoro, el segundo más votado en la provincia de Buenos Aires con 67,19%, fuera reelecto por encima del 27,76% del postulante de UxP, Ciro Albarengo.

El voto en blanco en Pila fue del 14,64%, traducido en 422 sobres, bastante si se tiene en cuenta que en este municipio de la Quinta Sección electoral se registraron tan solo 2856 sufragios. En el distrito, la elección fue para el histórico intendente local peronista, Gustavo Walker, que lidera el municipio desde 2003 y que sacó el 67,17% (el tercer candidato más votado en toda la provincia de Buenos Aires). Por detrás, quedó Gerónimo Goity de Juntos por el Cambio, que alcanzó el 32,82%.

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