Mariela Trimboli y Jorge Perns llegaron a Necochea a bordo de su combi y con una colección entera de cuadros que ilustran distintos paisajes del país. Vendiendo productos de su propia manufactura costean un viaje continuo que tiene por objetivo exponer su obra en todo el continente.

A bordo de una coqueta combi Volkswagen modelo 1983, Mariela Trimboli y Jorge Perns cruzaron las fronteras del distrito de Necochea persiguiendo su sueño de unir todo el continente americano, desde la Antártida hasta Alaska, mostrando una colección de cuadros en la que conviven el arte abstracto y los más maravillosos paisajes del país.

Su proyecto fue recibido en los últimos días por el director de Cultura municipal, Juan Gamba, quien quedó sorprendido por la envergadura de semejante emprendimiento y se puso a disposición de los viajantes, congeniando de manera inmediata a través de las aficiones compartidas por la vocación.  

“La idea es recorrer toda Argentina y, luego, unir Antártida y Alaska”, confió Mariela mostrando con orgullo su atelier itinerante, su “casita con ruedas”, frente a las puertas del Palacio de la comuna.

Y agregó sobre el proyecto que los tiene de visita por nuestro partido que “Argentina Abstracta es una colección de cuadros, pero también una visita guiada por los paisajes de nuestro país, a través de mi mirada, acompañada por la geometría y el arte abstracto”, como su nombre indica.

La quimera empezó allá por 2016, cuando comenzaron a recorrer distintas ciudades, pero siempre volviendo a “hacer base en Capital Federal, donde vivíamos”. Entre viaje y viaje, “empezamos a soñar desde el 2018 con vivir viajando, y acá estamos…”, cuenta la autora y diseñadora de la colección pictórica, aunque reconoce que, más allá de su talento, nada sería posible sin el trabajo en equipo con su “compañero de aventuras”.

Jorge, más abocado a la cuestión logística de esta aventura, revela que “nos propusimos Antártida – Alaska porque presentamos un proyecto en la Dirección Nacional del Antártico (DNA) para llevar la colección de cuadros a alguna de las bases aéreas. Quisiéramos que sea la “Vicecomodoro Marambio”, y estamos en ese trámite”.

En cuanto a las fechas y le cotidiano del viaje, el capitalino enseñó que “es un proyecto itinerante y nos vamos quedando todos los días en distintos lugares, según lo que vaya surgiendo. Hay lugares en lo que nos quedamos un mes, en otros dos días, pero siempre tratando de exponer en escuelas, centros culturales, restaurantes. Hemos estado en hoteles 5 estrellas y estacionados en la calle en una plaza, es el amplio abanico de estar tratando de mostrar nuestro proyecto”, aseguró.

Por el momento, todavía sin próximo destino cierto, “tenemos la idea de ir para el sur, pero no tenemos una agenda exacta. Queríamos visitar Lobería, La Dulce, e ir rumbeando hacia la Patagonia”, no obstante, “vamos haciendo camino al andar”, pudo sintetizar la artista sobre su empresa.

El proyecto “Argentina Abstracta” se caracteriza por la autogestión y por vivir del propio recorrido. “Además de exponer los cuadros, para sustentar el viaje lo que hacemos es vender productos con esos diseños: pañuelos de seda, reproducciones en láminas, mates pintados a mano, imanes para heladeras, fundas de almohadones…”.

“Tenemos un abanico de productos que van desde los señaladores ‘a voluntad’ hasta cuadros a pedido, pasando por todos los precios, para que el que quiera sumarse al sueño y ser parte, esta es nuestra manera de generar ingresos para seguir avanzando”, refirieron los soñadores, mientras montaban la combi para perseguir nuevos caminos y mostrar su arte por, quién sabe, dónde.

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