

En relación con la criptomoneda, Milei insistió en que no tiene ninguna vinculación con el caso y afirmó que las personas que participaron lo hicieron bajo su propia responsabilidad. “Los que entraron allí lo hicieron por voluntad propia, nadie les puso una pistola en la cabeza”, declaró el mandatario en LN+.
Asimismo, el Presidente calificó la controversia como “un conjunto de chimentos de peluquería de despechadas”, minimizando su impacto y deslindando responsabilidades. “Es un problema de terceros con terceros, no es un problema mío”, aseguró.
Milei también respondió a las acusaciones de Cristina Kirchner, quien lo tildó de “estafador serial” en referencia al caso $LIBRA. “Le aviso que la que está dos veces condenada es ella”, replicó el mandatario, recordando las causas judiciales que involucran a la expresidenta. “Tiene el problema de Hotesur, de Los Sauces, de Vialidad, le encontraron cinco palos verdes a la hija que nunca laburó. Vamos, seamos serios”, sostuvo.
Además, Milei acusó al kirchnerismo de haber cometido estafas mucho mayores a través del manejo del Banco Central. “La política, y en especial los Kirchner, usaron el Banco Central para estafarle a los argentinos 110 mil millones de dólares. Hablemos ahora de estafa piramidal”, disparó.
Durante la entrevista, el Presidente defendió su gestión y destacó la importancia del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), anunciado en la apertura de sesiones. “Una de las cosas que expliqué en el discurso de ayer es que el acuerdo con el Fondo es para sanear el balance del Banco Central”, explicó.
En la misma línea, Milei afirmó que su administración ha logrado avances significativos. “Hemos hecho más que en los últimos 80 años de Argentina”, aseguró, al tiempo que celebró el cumplimiento del 97% de sus promesas de campaña en el 25% de su mandato.
El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, también fue blanco de críticas por parte de Milei, quien negó haber solicitado una intervención federal del distrito pero señaló el creciente problema de inseguridad. “Buenos Aires se convirtió en un baño de sangre, ese es un dato de la realidad”, sostuvo el jefe de Estado.
En este contexto, reiteró su respaldo a la iniciativa del Ejecutivo para bajar la edad de imputabilidad y endurecer las políticas de seguridad. “Si fuese por mí la llevaría a 10 años. En Suiza e Inglaterra es así. ¿Por qué nosotros tenemos este número ridículo?”, cuestionó.
Consultado sobre su relación con la vicepresidenta Victoria Villarruel, Milei utilizó una metáfora futbolera para explicar la situación: “Riquelme y Palermo no se llevaban bien, y Boca seguía ganando”. No obstante, mostró molestia por la actitud de Villarruel al finalizar su discurso en el Congreso. “Quizás se olvidó que mis discursos los termino con ‘¡Viva La Libertad, Carajo!’”, lanzó con ironía.
Sobre la ausencia de legisladores en la apertura de sesiones, Milei interpretó la situación como un síntoma del cambio político en el país. “No se pueden bancar tantas verdades, tanto éxito. En el fondo, esto puede ser una muestra de la Argentina que se viene, porque el Congreso va a estar cada vez más teñido de violeta”, afirmó.
Finalmente, el Presidente ratificó su intención de consolidar una alianza electoral entre La Libertad Avanza y el PRO con el objetivo de derrotar definitivamente al kirchnerismo. “Voy a agotar todos los esfuerzos para que todos los que estamos del lado de la libertad y de la República estemos juntos y terminemos de ponerle el último clavo al cajón del kirchnerismo”, sentenció.
En el plano internacional, Milei desmintió cambios en la política exterior con Ucrania y reafirmó la alineación de Argentina con Estados Unidos e Israel. “A mí me preocupa fuertemente el pueblo ucraniano, que haya paz y se terminen las muertes, que negocien en un escritorio”, concluyó.