NECOCHEA | 2 ene 2025
Los que la vieron
Los radicales se calzaron la peluca para no quedar afuera de la polarización
Javier Milei jugó a la polarización y dinamitó todos los espacios políticos en menos de un año. Juntos por el Cambio voló por los aires; por separado, el PRO y la UCR -socios fundadores de esa coalición- penden de un hilo.
Por Déborah de Urieta para Diario con Vos
Javier Milei fue exitoso en algo: jugó a la polarización y dinamitó todos los espacios políticos en menos de un año. Juntos por el Cambio voló por los aires; por separado, el PRO y la UCR -socios fundadores de esa coalición- penden de un hilo.
El peronismo no tuvo mejor suerte: Cristina Kirchner volvió a ponerse en el centro de la escena disputándole el liderazgo a quien parecía ser su sucesor natural, Axel Kicillof. Y el PJ estuvo al borde de celebrar su primera interna en la historia del partido. Mientras, por goteo, sufre bajas en el Congreso. La última fue la del santafesino Roberto Mirabella, que este jueves abandonó el bloque de Unión por la Patria para armar rancho aparte. No dudó en apuntar contra CFK, a quien acusó, lisa y llanamente, de haberse convertido en "la jefa de La Cámpora" tras quedar al frente del partido que supo desdeñar.
Así las cosas, los hermanos Milei despliegan sus juegos de seducción para seguir dividiendo la arena política en dos. De un lado, quienes comulgan con "las ideas de la libertad". Del otro -sean o no kirchneristas- "los kukas".
Está claro que en ese mundo bipolar que el "triángulo de hierro" imagina hay un único líder: los Milei. A Mauricio Macri le llevó un año entenderlo. Mientras tanto, haciendo trabajo de hormiga, Las Fuerzas del Cielo siguen robándole dirigentes de peso. La defensa del Presidente a Cristian Ritondo, investigado por el entramado de empresas offshore de su esposa, fue interpretada en ese sentido. ¿Será el próximo que dé el salto a las filas libertarias?
Mientras tanto, los Macri resisten y desdoblan las elecciones en la CABA. Se las ingenian para preservar el distrito que vio nacer al PRO.
Quienes "sí la vieron" fueron los radicales. Sobre todo los del interior del país donde Milei, a diferencia de CABA y AMBA, arrasó en las elecciones del año pasado. Y, al menos por ahora, todo indica que en los comicios del año que viene volverá a suceder lo mismo. O al menos así lo perciben.
Los primeros que olfatearon este panorama, y que no dudaron en expresar su adhesión al Presidente, fueron los cinco diputados de la UCR que defendieron, a capa y espada, los vetos presidenciales (vetos a leyes que su propio partido había impulsado).
Se trata de Mariano Campero (Tucumán), Luis Picat (Córdoba), Martín Arjol (Misiones), Pablo Cervi (Neuquén) y Federico Tournier (correntino que no es radical, sino liberal, pero que integra la bancada que conduce Rodrigo de Loredo). En septiembre, cuando saltaron a la fama bajo el apodo de "los radicales con peluca", por bancar el veto a la ley que modificaba la fórmula previsional, uno de ellos le aseguró a este medio que no se irían del bloque, sino que darían la pelea desde adentro. También auguró que, hacia fin de año, serían más los "peluca".
Su pronóstico no fue para nada errado. "El bloque radical siempre tuvo más pelucas de lo que se creía", confesó otro diputado que formó parte de la reunión en Rosada. De hecho, el bloque terminó fracturado y la porción más grande, que conduce De Loredo, contiene a los cinco pelucas. Ese bloque es el que fue recibido por los hermanos Milei en Casa Rosada.
Algunos se sumaron por convicción y otros por "miedo", explicó uno de los invitados al convite que duró más de dos horas. Miedo a quedar "¡afuera!". Es que los radicales del Interior entienden que la oferta electoral es más acotada que, por caso, en CABA. Básicamente, interpretan que en el grueso de las provincias existe "peronismo y antiperonismo".
Y, sobre todo en los distritos que se elige un puñado de diputados, aquellos dirigentes que vayan por una tercera vía tienen altas chances de quedar fuera de carrera. De 2023 a 2025, el panorama electoral pasaría de tercios a mitades. El tercio que se diluiría es, precisamente, aquel que supo ocupar Juntos por el Cambio.
Es por eso que durante el encuentro en Rosada, Campero –en nombre de los 5 peluca– no dudó en desaprovechar el cara a cara con el Presidente para deslizarle que "quieren ser parte del cambio y empujar electoralmente". "Han sido muy generosos, siempre los tengo en cuenta" habría sido la respuesta que se llevaron del libertario quien, al mismo tiempo, habría asegurado que “sería bueno converger".
De Loredo, en cambio, no tocó el tema electoral durante la reunión. Pero expresó: "Presidente, cuente con este bloque".
Por las dudas, algunos radicales no se ilusionaron con la invitación a la Casa Rosada. "No deja de ser sorprendente el gesto", reconoció uno de los presentes en el encuentro. Pero no descartó que haya sido una manera de enviarle una señal a Macri, en la previa a que su primo desafiara a LLA desdoblando los comicios porteños y preparándose para jugar “por afuera” en las elecciones 2025.
"Están en el plan de volverlos locos a los del PRO, como hicieron con la defensa de Milei a Ritondo", dijo esa misma fuente, que consideró: "Macri no debe estar contento".
Un dato a tener en cuenta es que la reunión, en un primer momento, iba a ser con los 5 peluca y el mandatario. Es Patricia Bullrich la que oficia de nexo entre ambos sectores.
Pero, después, Menem (ladero de Karina) le extendió la invitación al jefe de la bancada, De Loredo, uno de los radicales más cercanos al presidente y fundador del PRO. Por eso, la duda es si la reunión fue para elogiar a los radicales, como hizo el mandatario durante el encuentro, o para mojarle la oreja a Macri.