El Ministerio de Seguridad que conduce Patricia Bullrich denunció por amenazas y extorsión al tituar de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Pablo Biró, luego de expresiones del dirigente sindical en medio del conflicto salarial que atraviesa el sector aeronáutico.

"Esto se va a poner mucho peor…", había declarado, y el Ejecutivo consideró como "graves" dichos comentarios, sosteniendo que las acciones y declaraciones del gremialista podrían exceder el derecho a huelga amparado en la Constitución y significar un acto ilícito bajo el delito de amenazas extorsivas.

El escrito presentado sostiene que el derecho a huelga se tiene que ejercer "de manera razonable y proporcional, y en el caso de servicios esenciales como el transporte aéreo, cualquier interrupción abrupta podría tener un impacto significativo para la gente y la seguridad pública".

En este sentido, las declaraciones de Biró se dieron luego de que el Gobierno declarara al transporte aéreo como "servicio esencial", imponiendo la obligatoriedad de mantener un mínimo de servicio en las actividades de importancia estratégica para el país.

En este marco, la denuncia hecha por la cartera de seguridad busca preservar la estabilidad de lo que consideran un servicio esencial y proteger los derechos de los ciudadanos. "Cualquier medida de fuerza que afecte servicios públicos esenciales sin agotar otras vías previas podría ser considerada una ´huelga salvaje´ y, por lo tanto, estar fuera del amparo constitucional", dijeron dentro del Ministerio.

Minetras tanto, los sindicatos aeronáuticos con Biró a la cabeza definiran el jueves nuevas medidas de fuerza en los principales aeropuetos del país. Los sindicatos exigen un aumento del 30% y frente a la falta de respuestas vienen realizando desde hace meses una serie de medidas de fuerza que interrumpen la salida de vuelos y la logística.