Luego de breves corridas en el microcentro porteño, al menos dos manifestantes fueron detenidos por la Policía de la Ciudad por agredir a efectivos. El Presidente siguió el operativo a través de las pantallas en el Comando Unificado de la Federal.
Tras algunas corridas y enfrentamientos en el microcentro porteño, al menos dos manifestantes fueron detenidos por la Policía de la Ciudad, cuando uno de ellos apuñaló en el brazo a un efectivo en Diagonal Norte, mientras que el otro agredió a los uniformados.
Estas detenciones se inscribieron en la aplicación del «protocolo para el mantenimiento del orden público», anunciado la semana pasada por la ministra Bullrich, destinado a evitar que los manifestantes ocupen la vía pública durante las movilizaciones.
Este fue el resultado en números de la movilización de movimientos populares y organizaciones sociales agrupadas en el bloque de Unidad Piquetera (UP) que marcharon esta tarde en el centro porteño hacia Plaza de Mayo, expresando su rechazo al ajuste económico del gobierno de Javier Milei y siendo la primera prueba para el protocolo de orden público del Ministerio de Seguridad nacional.
La marcha también conmemoró las protestas del 19 y 20 de diciembre de 2001, que resultaron en la represión del gobierno de Fernando de la Rúa, dejando un saldo de 39 personas fallecidas y la renuncia del entonces presidente.
Programado para las 16 horas, las columnas iniciaron su camino hacia la Casa Rosada por la diagonales Norte y Sur. A pesar de un operativo parcialmente exitoso -el Metrobús no fue bloqueado y el subte continuó funcionando- los manifestantes lograron cortar calles, generando enfrentamientos entre la policía y miembros del Movimiento Socialista de los Trabajadores (MST).
Una vez en Plaza de Mayo, con unas 10 mil personas agrupadas, se llevó a cabo un acto en el que se leyó un documento acordado por las organizaciones populares, piqueteras, sindicales, estudiantiles y de derechos humanos, según precisaron los organizadores.
«Estamos movilizando todos unidos este 20 de diciembre contra el hambre, en defensa del trabajo genuino, los salarios, las jubilaciones, la salud y la educación, de todos nuestros derechos, contra la represión y el ataque a los planes sociales. En unidad y movilización de los trabajadores ocupados y desocupados, de los organismos de derechos humanos, sociales, estudiantiles, ambientalistas, de género, sindicales y políticos, realizamos la primera gran acción unitaria de lucha contra el ajuste de Milei-Caputo y el protocolo represivo de Bullrich», afirmó el escrito.
Entre otras cosas, el documento reclamó por reapertura inmediata de paritarias; aumento de salarios, jubilaciones y planes sociales; un salario mínimo igual a la canasta familiar con ajuste automático mensual; ningún despido ni suspensiones; el pase a planta efectiva de todos los contratados, no a la reforma laboral ni jubilatoria, ni al tarifazo de los servicios y el transporte público; la defensa de la educación y la salud pública; y la reestatización con control de los trabajadores y usuarios de las empresas de servicios públicos.