Una sesión del Concejo Deliberante de Morón en la que se iba a tratar el presupuesto 2026 fue suspendida en medio de un escándalo: trabajadores municipales ingresaron al recinto en reclamo de la falta de pago de las horas extras de noviembre que adeuda el municipio a cargo del intendente Lucas Ghi (Fuerza Patria).

En el marco de un estado de asamblea permanente, el Sindicato de Trabajadores Municipales decidió movilizarse este martes hasta la sede del deliberativo.

Los manifestantes se ubicaron en las gradas y realizaron una ruidosa protesta que incluyó cánticos como “que se vayan todos” e insultos al jefe comunal.

La sesión debió ser suspendida por incidentes cuando algunos de los presentes arrobaron sillas y basura desde las tribunas del primer piso hacia el recinto.

Los reclamos continuaron fuera del edificio con cortes de calle y quema de neumáticos.

A nivel institucional, el gremio envió notas ante el intendente Lucas Ghi y el ministerio de Trabajo bonaerense ante las deudas en los extras que se suman a los bajos sueldos de los trabajadores y el Ejecutivo se comprometió a abonarlas a comienzos de enero.

Desde el gremio denuncian que la situación ocurre por segundo mes consecutivo y remarcan que las horas extras son fundamentales para los ingresos de los empleados comunales ante los bajos Salarios que percibe la mayoría de los trabajadores.

Protestas con incidentes en tres municipios peronistas del conurbano

La protesta de los empleados municipales de Morón se convirtió en la tercera movilización que termina en incidentes.

La primera tuvo lugar en Quilmes hace algunos días a raíz de una movilización de trapitos nucleados en UTEP y el MTE de Juan Grabois contra  el “Plan Integral de Ordenamiento Urbano y Vial” que incluyó la licitación de un nuevo sistema de estacionamiento medido.

El reclamo derivó en incidentes y la denuncia de represión policial por parte de las organizaciones sociales. Desde el Municipio y el HCD de Quilmes denunciaron que un grupo de 30 personas “encapuchadas y arrojando piedras” intentaron ingresar al recinto del Honorable Concejo Deliberante con el objetivo de impedir el normal desarrollo de la sesión.

La situación derivó en un tenso cruce entre la intendenta en uso de liciencia de Quilmes, Mayra Mendoza y el dirigente Juan Grabois.

Horas más tarde, militantes del Movimiento Evita y de la UTEP llevan a cabo un piquete en Lanús. El reclamo tuvo lugar frente al municipio a cargo del camporista Julián Álvarez, por “salarios dignos” y contra la “precarización laboral”, además de exigir un bono de fin de año, la continuidad de los contratos e incluso “productos navideños” para cooperativistas.

La movilización también terminó en incidentes con la quema de un  árbol de navidad colocado en inmediaciones al palacio comunal.