Sus declaraciones radiales actuales contrastan de manera evidente con lo que sostenía el año pasado, generando preocupación sobre su coherencia política.

De herramienta administrativa a maniobra política

En 2023, cuando defendía la Rendición de Cuentas del intendente Arturo Rojas, Zubillaga afirmaba: "La rendición de cuentas no deja de ser un informe económico-financiero, es una herramienta administrativa".

Sin embargo, en 2024, ya en la vereda opositora, su visión cambió drásticamente: "Yo entiendo que se minimiza, como ha sido la política continua de este Departamento Ejecutivo, se minimiza la función del Concejo".

De la solidez a la preocupación

El año pasado, Zubillaga sostenía que "los concejales que no acompañaron lo hicieron por consideraciones totalmente personales porque técnicamente no pueden decir absolutamente nada de esto y de hecho no lo hicieron", y remarcaba que "entendemos que la Rendición de Cuentas es muy sólida".

Hoy, en cambio, expresa una postura completamente opuesta: "Lo que vimos en esta rendición de cuentas es muy preocupante" y critica el proceso afirmando que hubo un "trámite exprés".

Del apoyo incondicional al rechazo rotundo

En 2023, Zubillaga minimizaba las críticas y afirmaba que quienes no acompañaban la rendición de cuentas lo hacían por motivos ajenos a lo técnico: "Los que no lo votaron simplemente fueron por consideraciones personales, no hay nada que decir en lo económico-financiero".

Ahora, como parte de Avanza Necochea, su postura es completamente distinta: "Nosotros vamos a rechazar la rendición, los tres concejales del bloque".

¿Cambio de visión o estrategia política?

Quizás la declaración más llamativa de Zubillaga en 2023 fue su elogio a la gestión económica de la Municipalidad: "La realidad es que en la Municipalidad se gastaron casi 1.000 millones de pesos menos; este es otro punto que demuestra la excelencia en la gestión y en la administración de los recursos".

Pero en 2024, su visión cambió drásticamente, ahora cuestionando con dureza lo que el año pasado defendía con firmeza.

Las declaraciones de Zubillaga ponen en evidencia una clara contradicción entre su postura cuando era parte del oficialismo y la que sostiene hoy como opositor. Su cambio de discurso refleja una transformación que puede responder a razones políticas más que técnicas.