

Entre sus principales medidas, Milei adelantó que se reformarán el Código Civil y el Código de Comercio para permitir mayor libertad contractual sin intervención judicial, y endurecerán las condiciones de deportación para extranjeros que delinquen. También insistió en la necesidad de bajar la edad de imputabilidad.
Enfrentamiento con Kicillof por el caso Kim
Uno de los momentos más polémicos de su discurso fue cuando volvió a cuestionar al gobernador bonaerense Axel Kicillof por la inseguridad en la provincia, a raíz del asesinato de Kim Gómez en La Plata. “Ser tolerante con los delincuentes es castigar a las personas de bien”, lanzó Milei, y sugirió que Kicillof debería renunciar.
Privatizaciones y economía
El Presidente aseguró que el Estado seguirá desprendiéndose de empresas públicas, incluso si hoy son superavitarias. También prometió una reforma tributaria para reducir la cantidad de impuestos nacionales a seis y generar competencia fiscal entre provincias.
En cuanto a la economía, Milei afirmó que buscará un nuevo acuerdo con el FMI y que planea levantar el cepo cambiario este año, sin incrementar la deuda. Además, sostuvo que “el ajuste cayó y seguirá cayendo sobre la casta” y reiteró que su gestión sacó a diez millones de personas de la pobreza.
Un discurso marcado por el enfrentamiento
Milei destacó su política de recortes, elogió el trabajo de Patricia Bullrich en Seguridad y de Mariano Cúneo Libarona en Justicia, y volvió a reivindicar el concepto de la “motosierra” como símbolo del ajuste estatal. También atacó a los medios y periodistas críticos de su gobierno, asegurando que “nosotros tenemos logros, no necesitamos periodistas mentirosos”.
Mientras tanto, en las afueras del Congreso, manifestantes opositores realizaron un cacerolazo en rechazo a las políticas del gobierno.