

El consumo masivo no levanta y ya suma nueve meses consecutivos en terreno negativo. De esta manera, acumula una baja del 12% en lo que va del año, una tendencia que se observa también en la brecha que se abre entre la suba de precios promedio en los canales tradicionales y su impacto en las ventas, que muestran una variación mucho menor.
Según datos relevados en el último informe de la consultora Scentia, el consumo masivo -alimentos, bebidas, productos de higiene personal y limpieza- registró un derrumbe de 22,3% interanual en septiembre, acumulando de este modo una baja de 11,9% en los primeros nueve meses del año.
Un dato relevante es que todas las categorías mostraron caídas muy importantes. No sólo se registra una baja de fuste en productos impulsivos (golosinas, chocolates, etc) con retracción del 32,3% en el mes, sino que incluso algunos rubros esenciales como Alimentación cayó 19,6%; Bebidas sin Alcohol el 26,7%; Higiene y cosmética un 24,1% y Productos perecederos 16,8% menos que en septiembre de 2023.
A nivel de canales, el relevamiento de Scentia destaca que mientras los autoservicios independientes cayeron 23,5%, las cadenas de supermercados marcaron una baja de 21,2%.