El dirigente de la CGT Necochea, Demian Ledesma, aseguró que son alarmantes los índices de pobreza y la situación socioeconómica durante los primeros seis meses de gestión del presidente Javier Milei, señalando que lo que más impacto le causa es que en este corto período de gobierno la pobreza creció 12 puntos, el mismo acumulado que tuvieron las gestiones de Mauricio Macri y Alberto Fernández.

"Es evidente que las gestiones anteriores fueron malas", afirmó el referente de La Bancaria en diálogo con el programa "Voces de la Ciudad", pero subrayó que lo que sucede en la actual administración duplica ese número en tan solo seis meses, lo que considera preocupante. Sin embargo, destacó que a pesar de este aumento acelerado de la pobreza, no parece haber el mismo impacto social que en las gestiones anteriores.

"Hay una sociedad que de alguna manera lo puede metabolizar", reflexionó, para atribuir este fenómeno a la falta de una alternativa política sólida que canalice el descontento social y permita una migración hacia una nueva esperanza. A su juicio, la oposición política no está construyendo un espacio fuerte que desafíe al actual gobierno y permita ofrecer una alternativa viable para la población.

En relación a la estrategia del gobierno, el dirigente gremial comentó que "manejan muy bien los tiempos", y utilizó como ejemplo la reciente aparición de Milei junto a Susana Giménez, una figura mediática popular en Argentina. "No es casual esa foto, están desviando la opinión pública hacia otros temas", apuntó Ledesma, quien comparó la estrategia comunicacional del gobierno con una "fórmula farandulera muy menemista" para administrar lo público.

En cuanto al impacto de las políticas actuales, Ledesma fue enfático: "Es obscenamente obvio que los sectores perjudicados son los abuelos, los laburantes y los pibes", apuntando a que los sectores más vulnerables son los que más sufren las consecuencias de las medidas del gobierno.

La crítica de Ledesma se centró no solo en los datos duros de pobreza, sino también en la falta de un proyecto político opositor que ofrezca una verdadera esperanza de cambio, lo que, a su juicio, mantiene a la sociedad atrapada en un ciclo de deterioro socioeconómico sin alternativas claras.