Detalles del aumento y su impacto en los jubilados

La Resolución 588/2024 establece que el incremento se aplicará sobre todos los haberes previsionales, incluyendo la Prestación Básica Universal (PBU) y la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM). La PBU pasará a ser de 107.291,45 pesos y la PUAM alcanzará los 187.632,18 pesos a partir de agosto. A pesar de este ajuste, una jubilación mínima seguirá sin cubrir la canasta básica total, que en julio se ubicó en 291.472 pesos, según datos del INDEC.

Ante esta situación, se espera que el Ministerio de Economía confirme la entrega de un nuevo bono extraordinario de 70 mil pesos. Este bono ha sido otorgado mensualmente por el gobierno libertario, pero aún no se han anunciado novedades sobre su continuidad en septiembre. De confirmarse, el bono permitiría que los haberes mínimos se equiparen a la canasta básica, un indicador clave para medir la línea de pobreza en la población.

Polémica por la nueva fórmula de movilidad jubilatoria

La actualización de las jubilaciones por parte de la ANSES se produce en un contexto de intensas discusiones en torno a la nueva ley de movilidad jubilatoria. El Congreso de la Nación aprobó recientemente un proyecto que propone una recomposición del 8 por ciento y vincula las jubilaciones directamente con la inflación. Sin embargo, el presidente de la Nación, Javier Milei, ha anunciado que vetará esta ley. Según Milei, la aplicación de esta fórmula podría poner en riesgo el superávit fiscal que su administración ha logrado mantener hasta el momento.

La decisión de Milei de vetar la ley ha generado controversia y preocupación entre los jubilados y pensionados, quienes esperaban que la nueva normativa permitiera una actualización más justa y equitativa de sus haberes en un contexto de alta inflación y aumento del costo de vida. La medida también ha provocado críticas desde la oposición, que argumenta que el veto perjudica a los sectores más vulnerables de la sociedad.

Expectativas y próximos pasos

En medio de estas discusiones, la ANSES continúa implementando los aumentos según la normativa vigente, mientras los beneficiarios esperan definiciones sobre el posible bono de 70 mil pesos y la resolución final respecto a la nueva fórmula de movilidad jubilatoria. El gobierno se encuentra ante el desafío de equilibrar sus objetivos fiscales con la necesidad de garantizar ingresos adecuados para los jubilados y pensionados en un contexto económico adverso.

Con este escenario, las miradas están puestas en las próximas decisiones del gobierno y del Congreso, que deberán encontrar un punto de equilibrio que permita atender las demandas de los jubilados sin comprometer la estabilidad económica del país.