

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, habló de un trámite que se debe realizar para la importación de autopartes y desató la polémica y la respuesta del sector. En una entrevista radial ironizó sobre el tema con el siguiente comentario: "El otro día descubrí una enfermedad: el mal del CHAS. Está el mal de Chagas, pero también está el mal del CHAS".
Al respecto, el funcionario detalló que "se trata del Certificado de Homologación de Autopartes", que es "un proceso carísimo". El titular de la novedosa cartera creada por Javier Milei explicó que "no se puede importar ninguna autoparte porque el que lo quiera hacer tiene que pasar por un proceso kafkiano. Como no hay autopartes, las que hay son más caras. ¿Qué pasa con el seguro? El seguro es más caro. Y si no hay autopartes, hay más robos de autos. Entonces, la gente muere porque hay más robo de autos. Por eso, digo que es una enfermedad, porque mata gente".
Y agregó: "Fui a mirar en la Agencia de Seguridad Vial sobre cuántos choques hay en la Argentina por un defecto en una autoparte. Hay cero. Los choques en la Argentina son por exceso de velocidad o por alcoholemia, que concentran el 85% o 90% de los choques. Tenemos los seguros más caros, tenemos más inseguridad. Directamente no debiera existir ese trámite y está en proceso de revisión".
Desde la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC) salieron a refutar las palabras del funcionario. "La norma es para dar cumplimiento a la Ley Nacional de Tránsito, que exige que sólo para las piezas de seguridad (frenos, faros, suspensión, vidrios, etc.) haya una certificación. Es para evitar la venta de piezas 'truchas' que afectan la seguridad. Brasil tiene un sistema muy similar. Con el mismo criterio se debería eliminar la exigencia de la LCM -Licencia de Configuración de Modelo- para los vehículos, y se podría vender cualquier auto sin saber si frena, por ejemplo", señalaron desde la entidad.